04 septiembre 2007

Muchacha en la ventana, Salvador Dalí


Me levanto del sillón, voy a la cocina, abro la nevera, la cierro, voy al cuarto, me tumbo en la cama, abrazo la almohada, me levanto, voy al comedor…
Abro la ventana y el mar me saluda, el rumor de las olas me calma, me mece en su vaivén. El salitre entra por mi nariz, inunda mis pulmones, me llena de paz.
Hace diez días que no se de ti.
Hace diez días que no vivo, que no siento, que apenas como y no dejo de beber. Mi amigo Cardhu acompaña mis horas, mi amiga maría empaña mis noches, y tú no estas.
Mi consuelo es el mar, sus mareas entran por mi ventana, mi única conexión con el exterior.
El teléfono, lleno de mensajes, de llamadas perdidas, agotó su batería hace tres días, pero no me importa, nada me importa ya.
Recuerdo nuestra última conversación, la última vez que oí tu voz, la última vez que vi tu sombra traspasar el umbral de mi vida.
Quizá discutimos, quizá dije cosas de esas que no siento pero siempre digo. Quizá tú también dijiste cosas, esas cosas que nunca dices, pero que sientes y piensas, el tipo de cosas que te van corroyendo por dentro hasta que salen todas juntas y me aniquilan.
Es posible también que hubiera un portazo, precedido de un estrellarse de cenicero en el suelo.
Lo cierto, lo realmente verdadero es que yo quedé aquí y tú marchaste.
He dejado de sentir, pero no me importa.
El vaso espera en la mesa, el hielo casi derretido…
Se que el tiempo pasa, que la noche llega a mi ventana seguida del día. Se que, de la misma forma, esto pasará y llegara otra cosa, aún no se cual, si será mejor o peor, pero dentro de mi apatía, empiezo a sentir el cambio.
Quizá solo sea que cambió a levante y el mar se ha rebelado.
De la misma forma que yo.
Cojo el vaso, lo apuro y camino hacia la cocina, a llenarlo de nuevo.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Recuerdo este cuadro en el pasillo de mi casa (por supuesto era una lamina,desgraciadamente para el patrimonio familiar....)y nunca le pregunté a mi madre el motivo de su privilegiada situación en medio del pasillo.
Puede que ella compartiera melancolías y ausencias como las tuyas, como la mujer del cuadro...Supongo que nunca me las hubiera contado, hay cuadros sobre los que es mejor no preguntar.
Tal vez el problema de los hombres, de los hijos y de los maridos sea que no queremos preguntar a la muchacha de la ventana el motivo de su permanente mirada perdida en la linea del mar.

Un beso,Jano

Anónimo dijo...

Leo, guapísima, me da cierto reparo comentarte algo sobre tu estado de ánimo, solo te diré que en la vida estamos para crecer. Abrir la ventana y ver el mar y oler el salitre puede ser una buena manera de abrir la mente, sentirse parte importante e imprescindible del universo que nos rodea.
Besos

LEO dijo...

Hola,
Veras María... en realidad esta historia no es sobre mi estado de ánimo, sino sobre la chica del cuadro, es ella la protagonista... Un pequeño juego entre Jano y yo... un cuadro, una historia... Y bueno, lo de que sea en primera persona... solo es por que así me resulta más fácil.
Un beso, guapa

Jano... todas las mujeres tenemos nostalgias... creo que forma parte de nuestra naturaleza, pero por más que nos pregunteis, no creo que supieramos daros una respuesta concreta...
Por cierto... esperaré ansiosa tu versión del cuadro... seguro que me sorprendes...
Un beso,
Leo

entregada dijo...

Buenas tardes Señora Leo, me alegra mucho su regreso y poder leerla de nuevo.
Aunque parece que esta pasando un bachecillo, la deseo de todo corazon que sea corto y llevadero.
Un saludo

Anónimo dijo...

Un muy buen juego, soy gran amante de ellos... hacen que no dejes la frescura que un día nos inundó, aunque algunos ya sean más perversos que jugar a las casitas con muñecas. Felicitaciones por el relato. Yo también espero la réplica.

Anónimo dijo...

Despues de como resolvistes el enredo de los contrayentes Arnolfinis y de la sugerente Isabella me pones en un envite muy peligroso.

Procuraré salir con bien del reto.
Estoy en ello.

Un beso,Jano.

Erotica Dominacion dijo...

Hola Leo !!!
De vuelta las dos, a la rutina, el trabajo, etc...
Pero lo bueno es que tenemos estos ratillos para leernos.

Un besazo enorme.

Erotica Dominacion

Anónimo dijo...

Me alegro que no estuvieses relatando tu estado de ánimo, me dió mucha pena que vuestra relación hubiera acabado, he metido la pata, la próxima vez intentaré ser mas cuidadosa.
Besos

Anónimo dijo...

¿Qué o a quien miraba la hermana de Salvador?
Encima de una mesa de roble queda una carta y un revolver recien disparado.

En cuanto pueda te lo cuento, mil disculpas por el retraso.

Un beso
Jano.

LEO dijo...

Mmmmm.... estoy impaciente por leerte... pero esperaré... no tengo más remedio...
un beso, Jano
Leo