10 agosto 2012

Sorpresa




Cuando sonó el timbre ya lo tenía todo preparado.
Abrió la puerta y mientras le daba el beso de bienvenida le colocó el antifaz…
-¿Dime que ves?
-Nada Señora.
-De rodillas chucho. Suplica por tu collar.


Colocándole la correa lo llevó al cuarto, siempre a cuatro patas, siempre perro.
Lo desnudó e hizo que, de rodillas, apoyara el torso en la cama, advirtiéndole, “por cada sonido que salga de tu boca, recibirás un golpe más”
Cogió el gato y se entretuvo calentándole la piel de los glúteos, divirtiéndose cada vez que alguna de las tiras iba más allá, dándole algún golpe entre las piernas, notando como a cada golpe, una pulsión la recorría, un estremecimiento que se dejaba traslucir en la conocida humedad entre sus piernas. Dando un último golpe, él suplico…
-Por favor Señora, por favor… Basta
-¿Quieres que pare?
-Si, por favor Señora…
A Ella una amplia sonrisa le iluminó el rostro…
-No… no voy a parar ahora… Ahora es cuando empiezo a divertirme.

Acariciando con sus uñas la enrojecida piel, rodeó la cama para coger la fusta, más manejable, más precisa.
Agarró su pelo y levantó su cabeza mordiéndole los labios, recorriéndolos con su lengua para acabar con un sonoro bofetón que arranco un gemido de la garganta del perro, dejó caer la cabeza.

Los golpes certeros de la fusta castigaban su maltrecha piel mientras él, gemía sin poder evitarlo, se le escaba algún grito ahogado.

En un momento dado (él había perdido la noción del tiempo, la cuenta de los golpes), noto como Ella le acariciaba, notó el frescor y el inconfundible aroma del lubricante. Con suavidad, Ella lubricó toda la zona que empezaba a adquirir ese granate que al día siguiente se convertía en morado. Esa marca que (orgullosamente), tanto él como Ella admiraban.

Oyó como Ella trasteaba en el cajón, escuchó el inconfundible sonido de los enganches del arnés y sus pasos, el adorable sonido de sus tacones. La satisfacción inundó cada milímetro de su ser. 

1 comentario:

artaroth dijo...

Despues de escribirla en fetlife he leido estos pensamientos suyos... que razón tiene... :) y que bien encaminado iba yo.