Llueve.
Odio la lluvia, me llena de melancolía.
Me levanté rara esta mañana, sin sol, sin luz, sin la alegría que me venía acompañando en estos últimos tiempos.
Todo el día por delante, todo el tiempo del mundo y yo pensando en ti.
Podría hacer muchas cosas, pero solo me apetece quedarme aquí, quieta, con la cara apoyada en el frío cristal.
Viendo caer las gotas, viendo pasar el tiempo.
Ladra un perro y me recuerda lo ineludible, el tiempo pasa, sigo sin hacer nada.
Afuera sigue lloviendo, dentro se avecina un temporal.
-